El 2009, y con una mochila a cuestas, salió de su natal Álvarez, Provincia de Santa Fé, Argentina, para perseguir un sueño de toda la vida. Ni en las noches de desvelo pasó por su mente el hecho de ser considerado hoy en día, a sus cortos 25 años, uno de los máximos referentes de San Luis de Quillota. Y menos ser chileno.
La tarde de este martes Fernando De Paul recibió una de las noticias que esperaba hace meses: el largo proceso de nacionalización había culminado y por fin podría decir con propiedad que es un compatriota más.
Con 17 años llegó al elenco canario pedido expresamente por Diego Osella, entonces técnico del Primer Equipo. A esa corta edad alternó con la juvenil canaria y con el plantel de honor, logrando a final de Temporada el ascenso a la Primera División del Fútbol Chileno.
Debutó el 2010 frente a Huachipato pero fueron las temporadas 2011 y 2012 donde el ahora chileno se consolidó como inamovible en el arco de San Luis de Quillota, siendo referente para la hinchada y sus propios compañeros. La jineta de capitán la ha portado durante dos años y no ha defraudado.
CHILENO
Sobre el proceso de nacionalización y el hecho de portar una segunda bandera, De Paul afirmó que esto es una forma de devolver todo lo que ha recibido durante su larga estadía de siete años en nuestro país.
«Yo soy argentino, amo mi país, pero me encontré con mi segunda casa, no pensé que sería así. Llegué muy chico, me recibieron de la mejor manera y me sentí muy cómodo. Todo esto es devolverle al país, a Quillota y a San Luis todo lo que me han dado. Yo me siento muy cómodo y hoy en día con mi señora y mi hija nos proyectamos vivir acá».
Si bien a corto plazo la idea de la nacionalización es liberar un cupo de extranjero dentro del plantel, la Selección siempre es un tema que ronda alrededor del meta canario. Sin embargo, la ilusión de De Paul se centra en hacer un buen campeonato y perpetuar su legado en nuestra ciudad.
«Uno se ilusiona con defender esta camiseta (de Chile), pero no soy de pensar a largo plazo, solo me centro en defender a San Luis y a esta camiseta que tanto quiero. Espero que el día de mañana se acuerden de mi, que siempre que entré a la cancha traté de defender esta camiseta de la mejor manera. Agradecido de la ciudad por todo lo que me brinda día a día, de lo cómodo que me siento y a San Luis que es imposible devolverle todo lo que me ha dado a mi y a mi familia», finalizó.
El ahora meta chileno jugará una temporada más con su querido cuadro canario y con la firme convicción de aumentar su cuenta personal de partidos jugados, el que por ahora, sólo por ahora, se clava en 171 duelos.