Un lunes 21 de septiembre del 2015, y tras una seguidilla de malos resultados que mantenían al Primer Equipo con un punto en seis partidos jugados, se presentó como nuevo Director Técnico a Miguel Ramírez, acompañado desde el principio por Marcelo Oyarzún en la preparación física y por Cristian Reynero como entrenador ayudante. Además de los tres, hoy el Cuerpo Técnico lo compone el Entrenador de Arqueros César Lagos y el Analista Audiovisual Felipe Donoso.
Ya han pasado dos años bajo el puente y el club ha logrado sostener un crecimiento que no partió fácil. Aquella temporada 2015-2016 fue de una lucha constante en la parte baja de la tabla, en puestos de descenso prácticamente todo el período. El debut del Cuerpo Técnico se dio ante Colo Colo, de «local» en Valparaíso y con derrota por la cuenta mínima, mismo resultado ante la Universidad de Concepción en Yumbel. La tercera fue la vencida, tras una contundente goleada por seis goles a dos ante Palestino, en una demostración de la intensidad y buen fútbol que perdura hasta hoy.
El término de aquel Campeonato 2015-2016 fue caótico. Se necesitaba ganar en el Clásico Provincial para no descender, y se logró tras una victoria por tres a uno. En Rancagua se necesitaba sumar urgente, pero se cayó por cuatro a tres en los últimos minutos con la suerte de que los rivales no sumaron. En el penúltimo duelo, nada mas y nada menos que ante el campeón de aquel año, Universidad Católica, una derrota sentenciaba la «B», pero los canarios se hicieron fuertes y ganaron por la mínima. Ya en Antofagasta, en la última fecha, una variedad de factores determinaría la suerte de San Luis. Fue un empate a uno que, ayudado por otros resultados, permitió la permanencia de manera agónica, sin carencia de suspenso.
Ya para la Temporada 2016-2017, el elenco canario comenzaría un dulce peregrinaje con partidos importantes y un sistema de juego respetable. Triunfos ante Colo Colo, partidazos en el Monumental y Nacional, y nuevas victorias ante Universidad Católica, marcarían un período que pudo terminar con algo histórico: la clasificación a un Torneo Internacional.
Claro, porque en el primer semestre de aquella temporada, los canarios llegaron al último partido del Apertura con la opción de avanzar a una Copa Sudamericana empatando en el Santa Laura, pero en un duelo con un gol legítimo anulado en el último minuto, le impidió al club la mayor alegría de su historia.
Ya para la actual temporada, San Luis de Quillota se encuentra luchando en la parte alta de la tabla de posiciones y en cuartos de final de Copa Chile, con un sistema de juego ofensivo, con presión intensa y que le ha permitido ganarse el respeto de los demás clubes nacionales. En rigor, con una identidad propia conocida por todos.
Durante este tiempo, el club ha logrado la venta y préstamos de jugadores como Fernando De Paul, Jean Meneses, Cris Martínez, Guillermo Pacheco Leandro Sirino y últimamente la de Felipe Saavedra a la Universidad de Chile, quien incluso con la camiseta amarilla fue llamado a la Selección Sub 21 y jugó un amistoso en Francia.
Todo este crecimiento futbolístico ha permitido que en lo institucional el club crezca de la mano de una visión social, cercana a sus hinchas y arraigada en lo más profundo de la ciudad de Quillota.
El resumen, de los dos años de Ramírez y compañía.